Entre marzo y junio, cada empleado del sector conllevó un coste mensual de 2.364,71 euros para la empresa, frente a los 2.306,10 euros del mismo periodo de 2017. El coste laboral en la confección, por su parte, marcó su primer retroceso desde 2015.
El coste laboral en la industria textil conserva su senda alcista. En el segundo trimestre de 2018, cada trabajador del sector implicó un coste mensual de 2.364,71 euros para su compañía, un 2,5% más que en el mismo periodo de 2017. En el sector del calzado, el coste laboral aceleró su crecimiento, mientras que la confección marcó su primer retroceso desde 2015.
El aumento del coste laboral en la industria textil fue propiciado por el fuerte repunte del coste salarial ordinario por empleado, que se incrementó un 4,2% entre abril y junio, hasta 1.495,9 euros. La subida contrarrestó los descensos registrados en el coste por percepciones no salariales, que se redujo un 42% hasta 17,47 euros, y la caída de las subvenciones y bonificaciones de la Seguridad Social, que se redujeron un 15%, hasta 7,99 euros.
En lo que va de año, el coste laboral en el textil ha crecido con tasas interanuales por encima del 2%. Los datos de 2018 contrastan con la irregular evolución registrada en 2017, cuando el coste laboral arrancó el primer trimestre con un retroceso del 2,9%. Entre abril y junio de ese año, la caída se moderó hasta el 0,3% y, en el tercer trimestre, los costes tomaron nuevamente impulso con un repunte del 1,7%. El último trimestre del año concluyó con una subida del 0,5%.
Por sectores, la industria de la confección registró en el segundo trimestre los mayores costes laborales de toda la moda en España, de 2.388,65 euros por trabajador. Sin embargo, la cifra fue un 0,3% inferior a la registrada en el mismo periodo de 2017, marcado el primer descenso de los costes laborales en el sector desde el mismo periodo de 2015.
La caída del coste laboral en la confección tuvo un principal desencadenante. Aunque el coste salarial ordinario en el sector creció un 1,9% en el segundo trimestre, hasta 1.487,64 euros, el retroceso del coste por percepciones no salariales, del 30,1%, y el de las subvenciones y bonificaciones de la Seguridad Social, del 13%, contrarrestaron cualquier subida.
En la industria del cuero y el calzado, el coste laboral por trabajador trepó hasta 1.929,82 euros entre abril y junio, un 1,9% más. La subida fue muy superior a la registrada en el primer trimestre, que fue tan solo del 0,7% respecto al mismo periodo del año pasado.
Las alzas registradas en lo que va de año se sitúan a gran distancia de los fuertes ascensos que el coste laboral en la industria del calzado experimentó en 2017. Salvo en el cuatro trimestre, cuando se elevaron un 2,1%, los costes laborales crecieron por encima del 3,5%, tocando techo en el segundo trimestre con un repunte del 5,1%.
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