Latinoamérica: una nueva ola electoral pone en jaque un mercado estratégico para la moda


Tras el apretado calendario de comicios el año pasado, países como Argentina, Bolivia o Uruguay elegirán en 2019 nuevos presidentes, que vuelven a sembrar incertidumbre en mercados importantes para la moda.

La política vuelve a sembrar incertidumbre en Latinoamérica. Tras el agitado calendario electoral que vivieron el año pasado países como México, Colombia o Brasil, este año otras economías de la región renovarán sus presidentes, en un contexto de mayor polarización de ideologías y con la guerra comercial entre Estados Unidos y China, que sigue azotando a varios mercados.

 

El próximo octubre estará marcado por las elecciones en tres economías. Los ojos del mundo están puestos en Argentina, que se debatirá entre reelegir al actual presidente, Mauricio Macri, o volver a viejos conocidos como Cristina Fernández de Kirchner. El país, con una deuda de 56.000 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional (FMI), ha sido protagonista de severos ajustes, hiperinflación y devaluación del peso argentino frente al dólar.

 

Las primarias presidenciales de Argentina se llevarán a cabo el próximo 11 de agosto, a pesar de que cada partido lleve un solo candidato. El 27 de octubre, el país sabrá quién será su nuevo primer mandatario, a no ser que se tenga que definir en noviembre en una segunda vuelta. Mauricio Macri se presentará a su reelección, esta vez junto al peronista Miguel Ángel Pichetto, como candidatos de la fórmula Juntos por el Cambio.

 

 

 

 

Al otro lado del mapa se encuentran Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner en la fórmula presidencial por el Frente de Todos, siendo los favoritos para hacer frente al oficialismo en la Casa Rosada. Por el partido Consenso Federal se presentará Roberto Lavagna, ex ministro de economía de Argentina desde 2002 a 2005, quien retomó este año su carrera política y estará acompañado por Juan Manuel Urtubey, actual gobernador de la provincia de Salta.

 

La industria argentina de la moda se mantendrá en vilo por la elección de un nuevo presidente. El sector ha ido desmantelándose en los últimos años, con empresas de indumentaria en concurso de acreedores y despidos masivos en fábricas como las de Alpargatas, Nike o Cheeky. Sin embargo, la debilidad del peso frente a la divisa internacional ha generado un escenario casi ideal para el aterrizaje de empresas de moda. En el último año, compañías internacionales como Pandora o Zadig&Voltaire desembarcaron en el mercado argentino, mientras que Louis Vuitton retomó sus operaciones en el país con un pop up store en Buenos Aires.

 

El país, cuna de fuertes operadores de moda en Latinoamérica como Rapsodia, La Martina o Todomoda, fue también uno de los focos de expansión de Inditex. En 2018, el titán gallego abrió una macrotienda de Zara en la ciudad de Rosario, tras más de una década sin aperturas en el mercado austral.

 

Además de Argentina, su vecino Uruguay también elegirá este año quién relevará a Tabaré Vázquez. El pasado 30 de junio, el país charrúa celebró sus elecciones primarias para definir nuevo presidente, mientras el déficit fiscal se mantiene al alza y la clase media sigue en ascenso. Las internas marcaron un hecho histórico en la política uruguaya, con la presentación de casi una decena de partidos para entrar en el parlamento, aunque las encuestas indican que el nuevo sillón presidencial será ocupado por Luis Alberto Lacalle Pou, por el Partido Nacional, de derecha, y Ernesto Talvi, del Frente Amplio de Izquierda.

Uruguay, con un territorio escaso y una población que no supera los 3,5 millones de habitantes, ha sido también un territorio fértil para las empresas de moda. De hecho, el mercado charrúa fue el último país latinoamericano en el que desembarcó H&M, que ya cuenta con dos tiendas en Montevideo. Además, la brasileña Lojas Renner abrió en Uruguay sus primeras tiendas en el extranjero, mientras que el grupo local Lolita sigue ganando terreno en el negocio de la moda con el lanzamiento de una cadena de low cost. Además, la española Pretty Ballerinas ultima la apertura de sus primeros puntos de venta en Uruguay.

 

Las elecciones de Uruguay y Argentina serán miradas de cerca por la economía europea, tras llegar recientemente a un acuerdo histórico entre el Mercosur y la Unión Europa, después de veinte años de negociaciones entre ambos bloques.

 

Bolivia, que ha realizado varios intentos por ingresar en Mercosur, también celebrará elecciones presidenciales este año, en el que Evo Morales buscará su cuarta reelección consecutiva. El país andino, con una creciente desigualdad social y corrupción, irá a las urnas el próximo 20 de octubre. En los últimos meses, la moda puso a Bolivia en el punto de mira con la llegada de nuevas marcas como Pandora, o la expansión de empresas españolas como Mango o Cortefiel, que abrieron nuevas tiendas en el país mediterráneo.

 

 

 

 

Centroamérica, por su parte, ha puesto en tela de juicio algunos de sus más recientes procesos electorales. Guatemala, que celebró sus comicios presidenciales el 16 de junio pasado, fue acusado de fraude, en una jornada que se terminará definiendo en segunda vuelta el 11 de agosto. El país centroamericano se debatirá entre la ex primera dama Sandra Torres, por el partido socialdemócrata Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) y Alejandro Giammettei, del conservador Vamos.

 

Panamá fue la primera economía de la región en elegir nuevo presidente este año. Laurentino Corizo, del Partido Revolucionario Democrático (PRD), ganó las elecciones del 5 de mayo y asumió el poder el pasado 1 de julio. El mandatario tendrá la tarea de sacar al país del canal de la corrupción y reactivar una de las economías más atractivas para el retail. Panamá es sede para muchas empresas españolas e internacionales que han desarrollado una estrategia de expansión en Latinoamérica.