La facturación se ha incrementado casi en esta proporción en cinco ejercicios
Inditex apuesta por España. El gigante de la distribución ha subido en los últimos cinco años un 32% el negocio que factura a sus proveedores locales, hasta 5.177 millones de euros. La cifra es especialmente significativa porque supone el 20,5% de los ingresos totales del grupo en el último ejercicio fiscal, cerrado el pasado 31 de enero. Pero es que desde el año 2013, la dueña de Zara, Massimo Dutti, Pull & Bear, Zara Home, Oysho, Stradivarius, Bershka y Uterqüe ha generado un negocio a las empresas españolas que le suministran productos o servicios por un total de 22.000 millones de euros.
Tan sólo el año pasado las ventas facturadas se elevaron en 550 millones de euros, lo que supone un 11,8% más. Fuentes de Inditex explican que "el perfil de estos proveedores es principalmente textil, pero incluye de forma muy importante también a otros sectores como el de la arquitectura, el diseño, la construcción, la seguridad, la electrónica o los servicios".
Hay que tener en cuenta, no obstante, que al margen de incrementar la facturación también ha subido el número de empresas españolas que trabajan con el grupo. En concreto, un 8% en los últimos cinco años, hasta alcanzar un total de 7.500 compañías.
El efecto sede
Desde Inditex explican que gracias al efecto sede -el hecho de que su cuartel general esté en Arteixo (Galicia) y que todas sus plataformas logísticas estén localizadas también aquí, se "mantiene un importante efecto tractor económico en España".
La empresa que preside Pablo Isla trabaja en conjunto con proveedores y fabricantes de 53 países diferentes para aprovisionarse de la mayoría de los productos y de las materias primas necesarias para su elaboración. Actualmente, el 59% de estos fabricantes se encuentran próximos a la sede de Arteixo, principalmente en España, Portugal, Turquía y Marruecos. "Nuestro proceso de aprovisionamiento es complejo, pero seguimos un principio claro: abastecernos de manera responsable y sostenible", asegura el grupo.
Para conseguir la optimización de la cadena de suministro, el gigante de la distribución textil lleva a cabo un proceso de auditoría y evaluación recurrente. En ese sentido, el grupo insiste en que "aplicamos criterios de sostenibilidad en todas las decisiones de compra y destinamos significativos esfuerzos a la capacitación de nuestros proveedores y nuestros auditores".
En el último ejercicio se realizaron 10.883 auditorías a proveedores en todo el mundo, con lo que se ha conseguido que el 95% de la producción sea realizada ya por empresas con el máximo nivel de calificación de cumplimiento que otorga la empresa. Más allá del negocio con proveedores, la empresa destaca también que gracias al efecto sede, mantiene una contribución muy alta con la Hacienda pública española.
Así, en el último ejercicio, la aportación de Inditex al Estado ha superado los 1.612 millones de euros, en concepto tanto de impuestos directos, que ascendieron 1.010 millones, como de los recaudados, otros 602 millones de euros más, como consecuencia de la actividad económica de la empresa y el pago de IVA o las cotizaciones a la Seguridad Social.
El impuesto de Sociedades supuso 504 millones de euros, lo que representa más del 2% de lo recaudado por la Agencia Tributaria en esta materia. De esta forma, la contribución de Inditex a las arcas del Estado en España por este impuesto supera los 2.000 millones de euros en los últimos cinco años.
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